lunes, 6 de marzo de 2017

ESCUCHA MIS PLEGARIAS (X)

La rutina del día a día... trabajo, compras, la casa, un par de compromisos sociales... me han tenido ocupada toda la semana.
Ninguno de mis demonios ha dado señales de vida estos días, y aunque la tentación de acercarme a la capilla ha aparecido en varios momentos, no quise hacerlo con las prisas de los días atareados.
Pero a pesar del poco tiempo libre, y de volver a mi ritmo de vida habitual, los cambios aparecen de forma evidente en mi existencia. Cuando me acuesto cada noche, mi desnudo cuerpo reclama su momento de caricias y gustosamente me concedo unos minutos de placer antes de que el sueño se apodere de mí. Algunos días, por el cansancio, son breves instantes donde mi mente vuela a recordar sus caricias mientras mis dedos juegan entre mis piernas para terminar en jugosos sueños que me llevan a despertar por la mañana tan deliciosamente femenina que la ducha se vuelve un lujurioso juego con los calientes chorros de agua haciéndome temblar...
Otras veces, abro el cajón de la mesilla de noche, y las olvidadas bolas chinas se encargan de regalarme intensos orgasmos en la soledad de mi cama con mi mente visualizando y recordando los salvajes encuentros con Luis y con Lucía....
Del modo que sea, cada mañana, aparezco en la oficina con una sonrisa radiante, con una seguridad inusual, y sobre todo, vestida para resaltar mi cuerpo... vestida cómo la mujer joven y atractiva que me siento...
Ya no me escondo bajo una imagen aburrida y gris, y ahora, evidentemente, ya no pasó desapercibida ante las miradas de los demás ni en el trabajo, ni en la calle, ni en el supermercado... Ahora me siento poderosa y sensual, y percibo como se vuelven a mirarme golosamente, percibo sus murmullos, y eso me hace sentir tan bien y tan a gusto conmigo misma que hasta he subido fotos nuevas en mis perfiles de las redes sociales, y las solicitudes de amistad, los mensajes por privado, aumentan día a día.
Todo un mundo nuevo para mí. Un placentero descubrimiento, donde, a pesar de saber que ese mundo no es lo que me interesa, hace que por primera vez en muchos años, me sienta la reina del baile, y consciéntemente, disfruto de ello... Incluso, un par de compañeros se han acercado a invitarme a un café fuera del trabajo, y ha sido un placentero triunfo rechazar su invitación, aparentando la misma indiferencia con la que ellos me trataban hace solamente una semana....
Me gusta sentirme mujer deseada, pero no por eso tengo intención de dejarme anular por el primer Casanova barato que se me acerque babeando con sus aires de machito conquistador. Me siento con poder y con fuerzas para ser yo quien conquiste cuándo y a quién realmente me apetezca. La época de mendigar cariño y aceptar migajas forma parte ya de un pasado al que no pienso ni quiero volver...
Así que, hoy sábado, con la tarde libre, con las cosas de casa ya terminadas, después de borrar y bloquear a unos cuantos pesados patéticos en mi facebook mientras comía, me he puesto las mallas, el ajustado top, la sudadera, los auriculares, las zapatillas deportivas, y pienso regalarme una larga caminata aprovechando la soleada tarde que se ha quedado.
Sin prisas, sin rumbo fijo, dejando que el sol, el aire y la música estimulen mi cuerpo y mis sentidos. Luego veremos que se me ocurre para la noche del sábado... hace tanto que no salgo, que quien sabe, hasta me animo a dar una vuelta y tomarme una copa, qué me lo merezco....

Continuará....

MICHEL GARCÍA
LEGNA LOBO NEGRO

derechos reservados

3 comentarios:

  1. Ja,ja,ja... intentaré seguir con esa linea...

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  2. Magnífico como cada uno de ellos.
    Mis felicitaciones por tan maravillosa e intrigada serie

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