jueves, 2 de abril de 2020

ELIXIR.

¡Yo creía qué sabía besar!
Hasta que tu boca se cruzó en mi camino y tus labios se pegaron a los míos.
Entonces comprendí que era solo un principiante, un aprendiz que a partir de ahora dedicará todo su tiempo y sus ganas a estudiar tu perfecta anatomía dejándose guiar por el fuego de esa lengua traviesa y perversa.
Y repetiré materia con sumo placer todas las veces que sea necesario.
No habrá dudas que queden sin resolver.
Me entregaré conscientemente a saborear ese exquisito manjar sabiendo que terminaré por convertirme en un obediente esclavo que necesita alimentarse cada noche de ese adictivo elixir que su dueña y señora le ofrece golosamente.


MICHEL GARCÍA
LEGNA LOBO NEGRO

derechos reservados

2 comentarios: